La guerra contra el fuel se extiende a las rías de Vigo y Pontevedra. Es un combate «épico, dramático y esperanzador», recoge La Voz de Galicia. 7.000 personas repartidas en 1.200 barcos se movilizan a lo largo de las rías Baixas. Al menos otras tantas colaboran desde tierra firme. Unos limpian playas y otros desempeñan labores de apoyo (construcción de barreras artesanales o preparanción de bocadillos), pero con el mismo objetivo: evitar que el fuel destroce el país. Los problemas son los mismos de ayer. Faltan medios.
La Administración proporciona contenedores para verter el fuel y mascarillas y guantes protectores. También llega a un acuerdo con Repsol, que suministra combustible gratis a todas las embarcaciones que participan en la lucha. Los marineros de la ría de Arousa, con una pequeña ayuda del viento, vencen la batalla, pero saben que todavía queda mucha guerra por delante.
El chapapote llega a las Cíes
El fuel afecta a las Cíes. Las barreras para evitar el desastre han llegado tarde. De nuevo los marineros y su infatigable lucha evitan que los daños sean catastróficos.
El Gobierno continúa ocultando información. Rajoy informa de que las prospecciones del Nautile no detectan grandes agujeros. «Hilitos de plastilina», dice el vicepresidente. Aunque los resultados de las inmersiones se clasifican como confidenciales.
Polanski y la costa más bonita del mundo
Roman Polanski, que asiste en Madrid al primer pase de su película El Pianista, se hace eco del desastre del Prestige. «Recuerdo aquella costa como la más bonita del mundo». El célebre director rodó a principios de los 90 «La muerte y la doncella» en Ferrol y Valdoviño.
Descarga gratis el periódico del día