El presidente del Gobierno pasa apenas tres horas en la comunidad y promete 265 millones para paliar los daños del Prestige. Además, ha anunciado la contratación de 7.000 parados para limpiar las playas. El jefe del Ejecutivo afirma que llegaba «con los deberes hechos», mientras la tercera marea negra llegaba a las rías Baixas y los marineros no tenían medios para combatirla. Aznar no visitó ninguna zona de costa afectada. Se limitó a sobrevolar las Islas Cíes y estuvo gran parte del tiempo reunido en la torre de control del puerto de A Coruña con Manuel Fraga, Mariano Rajoy y el alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez. El presidente evitó encontrarse con los manifestantes. Había un policía por cada dos personas y el jefe del Ejecutivo llegó en una comitiva de 13 vehículos. Los agentes detuvieron a un hombre que ni siquiera estaba en la manifestación. Fue golpeado, por lo que tuvo que ser trasladado al Juan Canalejo con varias contusiones, y trasladado a un furgón policial.
El temporal desarma el operativo contra la marea negra
Los barcos que salieron a combatir la mancha tuvieron que regresar a puerto a causa del mal estado del mar. Los vientos desplazan hacia el norte el frente de la mancha y se espera que esta noche contacte con las rías Baixas. «La gente se está jugando la vida», afirman los vecinos.
El comité científico confirma que el Prestige derrama fuel por dos escotillas
Con la costa asolada por el petróleo, el barco sigue perdiendo fuel a borbotones. Un informe de los expertos que asesoran al Gobierno confirmó que el petrolero vierte su carga por dos aperturas de casi un metro en la proa.
España se vuelca con Galicia
Numerosas instituciones y organismos de todo el Estado lanzan iniciativas para ayudar a los gallegos. Conciertos, líneas de crédito desde los ayuntamientos, envío de material para la limpieza y víveres para los voluntarios.
